LA IMPORTANCIA DE UN INTESTINO SANO.

Importancia de un intestino sano.

¿Alguna vez te has preguntado en que condiciones tienes tu intestino?

¿Tienes problemas de salud y no sabes de donde te vienen?

Esta información que te voy a dar es muy importante para que cojas las riendas de tu propia salud.

No andaban muy desacertadas las culturas que situaban al intestino como el centro del alma, como flujo de energías positivas y localización del equilibrio espiritual y físico del ser humano. La SEROTONINA de gran importancia en la vida afectiva y emocional es producida en su mayoría en el intestino y no tanto en el cerebro. El neurólogo norteamericano Michael Gershon pone de manifiesto como el intestino no solo produce un gran número de neurotransmisores sino que también dispone de más de 100 millones de neuronas, superando al total de las que dispone la médula espinal. Si además se añade que las vísceras disponen de un aparato nervioso propio y autónomo, que es idéntico al cerebro hasta en los tipos de células y receptores, podemos llegar a hablar de un “cerebro intestinal” como así lo definen su obra “El segundo cerebro”, (“Second Brain”) Actuando sobre el mantenimiento y equilibrio de la salud intestinal se va a poder actuar sobre la salud integral de todo el organismo, mejorando la acción terapéutica específica sobre otras patologías aparentemente ajenas al aparato digestivo.

Desarreglos fisiológicos intestinales.

Efectos directos.

• Fermentaciones anómalas y putrefacciones.

• Atonía intestinal y/o peristaltismo debilitado.

• Congestión y meteorismos.

• Disbiosis.

• Permeabilidad irregular:

Por exceso: hiperpermeabilidad.

Por defecto: malabsorción.

• Alergias e intolerancias provocadas por alimentos.

• Toxicidad por restos de medicamentos, aditivos, metales pesados, pesticidas …

• Sobrecarga hepática. 

Efectos indirectos.

• Obesidad.

• Cefaleas/Migrañas.

• Afecciones dermatológicas.

• Trastornos musculares y articulares.

• Retención de líquidos y otros procesos inflamatorios.

• Enfermedad de Crohn, rectocolitis.

• Estreñimiento crónico y colopatías.

• Degeneración y déficit inmunológico.

• Fibromialgia / Fatiga crónica.

• Candidiasis.

• Envejecimiento prematuro.

• Digestiones molestas.

¿Quién debería tratar su intestino? Todas aquellas personas que sufran de alguna patología.

Miguel Ángel Clemente Nieto. (Master Universitario en dietética y nutrición humana, Profesor de higiene alimentaria y alimentación biológica).